Ese cancer en mi, era una oportunidad de vida

A fines de mayo de 2008, tuve un episodio de hematuria (sangre en la orina) que obligó a una visita al urologo. Empezamos con los estudios correspondientes y según las tomografias se observaba un bulto en la vejiga. En junio me hacen una biopsia con el siguiente resultado: adenocarcinoma mucinoso infiltrante, un tipo de cancer que se dá uno en un millon, cancer de uraco, ¿que es el uraco? es la unión desde la vejiga del feto con el cordon de la madre, y es por donde el bebe elimina su orina antes de nacer, una vez nacido ese agujerito se cierra, y el cordón se disuelve en un par de años. No fue mi caso, mi cordón se calcificó alcanzando un diametro de 5 cm y un largo de 30 cm. donde estaba el uraco, se formó un tumor del tamaño de una naranja.
Resultado: se cortó un pedazo de vejiga del tamaño de una porción de pizza con el tumor en el centro, ya que al ser como moco, era riesgoso cortarlo porque se podia esparcir en mi cuerpo, eso venía con el cordón umbilical adosado y el ombligo. También se extirparon los ganglios inguinales por precaución.
Uno de los días en terapia intensiva -después me enteré- corrí realmente riesgo de vida, estuve 20 dias internado con sonda y 2 meses de reposo. Bueno, este sería el historial médico.
Vamos a lo bueno, hacía ya un tiempo largo que iba a las misas en el Sagrado Corazón de San Justo, Buenos Aires, desde ese lugar siempre pedia por los demas y siempre me escuchó,  por que no habría de hacerlo en ese momento. 
Soy conciente que no tuve mucho tiempo para plantearme el por que a mi? entonces comencé a ir a un grupo de psicoterapia para pacientes oncológicos llamado “apostar a la vida”, realmente el grupo es excelente, sostiene a muchos enfermos con patologías mas complejas que las mías, pero sentía que no era ese mi lugar, me faltaba algo mas y mientras seguia yendo al Santuario a orar.
Te cuento que era una persona acostumbrada a manejar situaciones complejas, pero por primera vez en mi vida, le buscaba la vuelta a la situación y no sabía para donde ir. Superado y vencido estaba por la angustia y el miedo, me entregué al Señor. Puse mi vida en sus manos y le dije: Señor realmente se haga tu voluntad, aunque no me guste. A partir de ese momento el cambio fue contundente, sentí muy dentro mío que todo iba a estar bien.
Todavía recuerdo y recuerdan mi sonrisa dándoles ánimo a mis familiares y a mi esposa cuando iba camino al quirofano. Ellos se deshacian en lagrimas. También recuerdo esa noche en terapia, que me pase rezando por la salud de un chico accidentado con una moto.
Me dieron de alta el 21 de setiembre de 2008 y el 4 de octubre, a 2 meses y medio de la operación caminé hasta Luján sin saber si iba a llegar o no, Dios quiso que llegara.
Cuando parecía que todo terminaba, me dan la noticia que tenía que hacer rayos. Me informan que los rayos provocarían esterilidad permanente. Por eso me piden que haga una criopreservacion de semen, para intentar un embarazo in-vitro más adelante. Como consecuencia de la operación la calidad de las muestras eran muy malas, con muchísimas celulas inflamatorias y con una motilidad del 20%. Nuestra tristeza era muy grande, se acercaba el dia de la madre y mi esposa en un ataque de llanto me dice: "no me quiero quedar sola... si vos te moris, que hago yo?" faltaba una sola extracción que se haría un día lunes. Durante la noche acostumbramos orar y pidiendo La Palabra nos dió la Anunciación a Zacarías. Imaginate nuestra sorpresa, el domingo a la noche pedimos La Palabra nuevamente y otra vez la Anunciación a Zacarías. Cuando el lunes realizo la muestra, la bioquimica me preguntó que había hecho, porque la motilidad aumento al 60%, no había celulas inflamatorias y había 27.000.000 millones de espermatozoides, una cantidad similar a la que tenemos en plena adolescencia.
Los rayos comenzaban en noviembre, teníamos un sólo ciclo para intentar el embarazo. Dios es grande y el milagro se produjo, mi alegria era más por mi señora que por mi. Yo le decía
viste que no te vas a quedar sola?
Pase por los rayos y no tuve casi ninguna de las complicaciones que podrían haberse presentado, incluso en ciertas oportunidades mientras me hacían la aplicación yo oraba y percibía el olor a incienso. Creo que Dios estaba a mi lado.
Paralelamente concurria al grupo de oracion Sagrada Familia de pastoral familiar del Sagrado Corazón y me invitaron al servicio y yo acepté con gusto.
Desde ese momento cambié mi lugar allá arriba en el templo por uno más cercano al altar. Sirvo en las misas de la Virgen de la Dulce Espera y estoy encargado de acompañar la imagen de la Virgen durante la misa.
Sabés que cuando pedía, nunca pedi curarme. Sólo pedía un tiempo y que cuide a mis mujeres. Quizás esa acción agradó tanto a Dios que decidió dejarme un tiempo más por estos pagos. María Belén fue presentada y bautizada en el Santuario del Sagrado Corazon, durante la Misa de la Dulce Espera.
Para terminar quiero decirte que si es feo estar enfermo de cualquier enfermedad, mucho peor es padecer una enfermedad crónica como el cancer en sus diferentes tipos. Debemos luchar contra nuestros miedos y con los miedos de nuestros conocidos que no saben como acercarse a nosotros y a veces terminan alejandosé.
Por eso es muy fácil enojarse con Dios y atacarlo por lo que nos pasa, me alegro que haya puesto a mi suegro en mi camino para poder ver que ese cancer en mi cuerpo era una oportunidad de vida para otra persona, porque el Señor tenía preparadas otras cosas para mí vida. No hay que preguntarse por que a mi? es preferible preguntar por que no a mi? desde ese punto de vista surgió mi acercamiento al Señor que estaba Vivo y realmente estoy agradecido de haber sufrido lo que sufrí, porque ahora valoro inmensamente lo que tengo y no puedo dejar de dar testimonio de su amor. Bendiciones.
Gustavo