Me vino la imagen de cuando yo tenia 15 años...

Quería escribir mi experiencia para mayor Gloria de Dios, por que me pareció interesante ir contando lo que me pasó desde la pequeña charla que tuve cuando terminaba la Misa de clausura con quien nos predicó a mediados de julio de este año. Le conte de mi problema de incapacidad de sentir gustos y olores desde hace ya mas de 7 años (ahora tengo 22), me sentí movido a transmitirselo por que en mi interior la voz de Dios me decia: "ahora te quiero sanar de esto". No quiero ser muy extenso pero te cuento a grandes rasgos lo que senti y lo que me viene pasando hasta ahora.
Desde hace unos 7 u 8 años me diagnosticaron Poliposis nasal, son polipos o (tumores benignos) alojados en la base del craneo. Es una enfermedad un poco complicada de curar, lejos de ser mortal, te desagrada la calidad de vida, porque en los grados mas avanzados (como el que tenía yo) la falta de olfato y gusto se le suman la incapacidad de respirar por la nariz, llevándome a dejar de hacer deportes y a una alteracion en el habla. Me operaron 2 veces, una vez en Rosario y la última en Buenos Aires, por lo complicado del cuadro en Santa Fe nadie atendía mi enfermedad. La unica solucion médica a mi problema era operarme cada tanto, y el que vuelvan a crecer "es cuestion de suerte" según los médicos, hay personas que se han operado 1 vez y nunca más, como los hay quienes todos los años vuelven al quirofano. En mi caso, agravado por mi "alergia" y por no seguir un tratamiento medico anti-alergico (lo dejé por que parecía una persona mayor con tantas vacunas y pastillas) los polipos volvieron. Como te dije antes, al alojarse en la base del craneo, la operación puede comprometer los tejidos blandos del cerebro, por lo que NUNCA se extirpan de raiz, sino que se los va podando.
La Sanacion: Desde que empeze a creer en Dios con mas Fe (fines del año pasado) mi problema de Polipos fue mejorando notablemente, incluso mi alergia casi desapareció por completo. Para mi los pólipos fueron la excusa perfecta para hablar con una hermana de la renovación carismática, queria que me cante la posta de otras cosas, más allá de los pólipos y desde ahí, ella me dijo que Dios iba a sanarme por completo (su testimonio personal habla más que las palabras: Dios la sano de un Cancer terminal. La mejoría entonces, comenzó a notarse en que no tenía tanta alergia como antes, pero por que fui sanando otros ambitos de mi vida, como por ej la ansiedad, traumas, etc. Pero mi olfato y mi gusto nunca re-florecieron, inclusive cada vez que oraba por la sanación de mis pólipos, me metía los dedos en la nariz y todavía los tenía en el mismo lugar. En el retiro que nos predico G. Rinaudo, cuando pude hablar con él, me preguntastó cuanto hacía que tenía este problema, y de una me preguntó que me había pasado hacia 7 años: en ese momento se me vinieron a la cabeza 2 imagenes: el olor del velatorio de mi abuela y el de un compañero del colegio, y el olor de un compañero del colegio (un chico gordo que tenía olor a "empanadas"), como las 2 cosas me resultaron tan tontas no se las dije -màs allá de que estaba al límite con el tiempo- entonces, al otro día hablé con una señora de mi grupo de oración y le comenté lo vivido con Gabriel, ella me dijo: pedí un baño de luz, así fue que Dios, 2 días después del retiro, me regaló el olfato pero para 1 sólo olor, y era el olor a hierro fundido, olor a soldadura.
Esa misma tarde tenía el grupo de oración, entonces le comentó a esta hermana servidora y me dice: a que lo asocias, y al instante se me vino la imagen de cuando yo tenia 15 años y le ponian la tapa al ataud de mi abuela, cuando le dije eso... ella me dijo: Dios te acaba de sanar de ese recuerdo. Al día de hoy recuperé el olfato y el gusto, tengo una excelente mejoria... la tengo.
Perdón si fui muy extenso pero imaginate la felicidad que tengo, sé que Dios me sanó y seguramente me seguirá sanando interiormente.
Bendiciones, F