Y yo veía que no me daban ganas de tomar

Les quiero contar algo antes de dar mi testimonio del paso de Jesús por mi vida.
Soy hija de madre soltera, rechazada por mi familia, de mi padre sólo sabía que le entregaba un cheque cada mes a mi madre y nada de esperar de él un gesto de amor. Quiero compartir algo con ustedes, un día me lo encontré en un centro comercial ya hace unos cuantos años, él cuando me vio me reconoció entonces yo me le acerque, lo iba a saludar dándole un beso y se retiró alejandosé de mi. Pude ahi experiemntar un nuevo rechazo por parte de él. Imagínense como me sentí en ese momento al volver a experimentar un nuevo abandono!. Mi adolescencia no fue muy feliz que digamos mi madre me cuidaba hasta con la sombra.
Fui madre soltera muy niña y cuando mi niña tenia 6 años conocí un hombre que yo creí que era el mejor hombre del mundo, este hombre era comprometido y sin embargo le creí todo lo que me decía y me fui a vivir con él, fue una convivencia de 18 años. Fueron años amargos, vino el maltrato verbal y a lo último fue maltrato físico. También violada para acabar de ajustar, era alcohólico y mujeriego.

Cuando tome la decisión de separarme fue un día que le dije al Señor por favor ayúdame, dame fuerzas. Ya que prefiero pasar hambre, que la mejor comida llorando. Saben por que estaba ahí por que era una mendiga de amor. Siempre fui una mendiga de ser amada. Pagaba cualquier precio para sentirme amada. Perdí mi empleo en una gran compañía y volví a mi casa, fue horrible por que me sentía la mujer mas humillada del mundo y me volví muy depresiva, el día sábado me encantaba tomar una cerveza y el licor que había en la casa, me lo tomaba con un café, pero... yo no era alcohólica.
El día 30 de agosto fuí a la conferencia de Gabriel Rinaudo en la ciudad de Medellín, me encantó. De echo yo conozco a la Escuela Biblica Católica Yeshu´a hace 10 años, pero me alejé unos años debido a que me fui a vivir a otra ciudad. Como les decía, ese día al terminar la tarde él estaba orando y el Señor estaba sanando a unas personas que sufrían de asma y de pronto dijo hay una mujer que se esta sanando del alcoholismo y yo seguí orando por que esa sanación no era para mi, por que yo... no era alcohólica. Pero en ese momento sentí que me ahogaba y me dio un mareo muy fuerte, no lo relacioné por que Gabriel decía que esa persona estaba sintiendo ganas de vomitar.
Pasaron los días y yo veía que no me daban ganas de tomar nada de alcohol, ahí fue donde comprendí que esa sanación era para mi, lo mas curioso es que yo no fuí para que me curara del alcohol, por que yo... no era alcohólica. Yo había ido para decirle a Dios gracias por que él nunca me abandonó, siempre ha estado conmigo. El me eligió, El guía mis pasos y la bendición mas grande es que estoy iniciando mi propio negocio, un sueño que siempre he tenido ese es otro testimonio que después se los contaré.
Quiero decirles algo que no estoy experimentando en mi vida hoy, Dios obra donde menos lo esperamos. Dios los bendiga. Una mujer sanada de alcoholismo.